Siempre sospeché que con modelos matemáticos adecuados deberían poder conectarse fenómenos que desde el sentido común (o desde los compartimientos estancos de la universidad) se consideran diferentes esencialmente, como la vida, las ciudades o el comercio.
Cuando me llegó un libro de Lászlo Barabasi y otro de Paul Krugman, ambos por casualidad, descubrí que muchas cosas que parecían no estar relacionadas en realidad estaban conectadas por patrones al menos visuales, aun cuando no podía comprender las matemáticas interiores a esos gráficos.
Unos años después me llegaron las ideas de otro basketbolista (pero no fracasado) como yo: Adrian Bejan y su programa de investigación constructal. La idea es que tamaño, velocidad y vida útil, si son adecuadamente medidos y combinados, producen unas lineas que predicen cosas extrañas, como el peso de los aviones dentro de 20 años o la velocidad de los reptiles voladores del jurásico.
Se trata de analizar los flujos y como los sistemas simplemente cambian su arquitectura para reclutar mas recursos, no importa si son urbes, bacterias o robots.
Por ejemplo el Producto Bruto Interno (PIB) es esencialmente proporcional al trabajo generado por los habitantes de un territorio, por lo que se puede pensar en la riqueza como un flujo de energía: la distribución no uniforme de riqueza se hace más acentuada cuando una economía se vuelve más compleja con el fin de cubrir intersticios más y más pequeñas del territorio en general y obtener una mas intensa absorción de recursos.
Esto permite que, si se conoce la población de una ciudad y en qué país se encuentra, se puede predecir con bastante exactitud el número por ejemplo de estaciones de servicio o personas durmiendo a la intemperie. Buenos aires tiene unos 3 millones de habitante y 5000 personas duermen en la calle, si se quiere tener un punto de partida.
Se puede usar http://www.gapminder.org/ y funciona bastante bien.
¿Los ratones y las metrópolis están vinculados? ¿La teoría de la evolución no es mas que un decorado de un movimiento mucho mas simple y extendido mas allá de los seres vivos?
O visto desde otra perspectiva: ¿las ciudades son organismos vivientes? ¿Los desplazamientos de camiones en un mapa son comprensibles como vasos sanguíneos?
Todo parece mas fácil si uno piensa mas en escalas y fractales que en linealidades. Por ejemplo: se sabe que una ciudad que dobla a otra en población no tiene el doble de la infraestructura y el doble de la productividad. Las geografía demuestra que tendrá un poco menos infraestructura y un poco más la productividad por habitante (así como más delitos). Luego, conociendo algunos pocos atributos (población, productividad, infraestructura) articulados podríamos obtener algunas predicciones interesantes.
Llegamos a la idea central: si la política es el arte de lo posible es tambien el arte de saber lo que es imposible. La igualdad es imposible, porque no habría flujos, movimientos, desplazamiento de energía. Dicho de otro modo: en la medida en que una arquitectura cualquiera se hace mas compleja mayores serán sus flujos, es decir la desigualdad. Las sociedades complejas tenderán a crear desigualdad.
Entonces viene la pregunta por el obsoleto ser humano: los planificadores urbanos, los economistas, los políticos, los diseñadores en general: ¿deberían pensarse a sí mismos como facilitadores de los procesos matemáticos subyacentes?