Los mayas construyeron cosas inmensas sin metales, sin poleas ni animales de carga pero sus construcciones subían, como tratando de tocar el cielo.
Tenían abundancia, pirámides multicolores, ciudades de mas de 100 mil personas, palacios centrales para las élites gobernantes y maravillosas ceremonias rituales con dioses pasionales que se dedicaban a proveer agua.
Nuestra vida es muy parecida. Sus escribas tambien legaban narraciones para el futuro y aseguraban el cobro de impuestos a cambo de ceremonias que aseguraran la entrega agua. Como dice la canción aquella nube oscura y fría está bajando de nuevo.
Hace 1200 años empezó a llover menos y durante cambios en los patrones de la tormentas monzónicas por 100 años hubo sequía, se acabaron las reservas de agua y madera y colapsaron los cultivos. Cualquiera de los que tenemos unos años encima podemos dar fe de lo que el clima ha cambiado en las últimas décadas y sin embargo no hemos cambiado ni una de nuestras costumbres por eso.
Cuando llegó lo fuerte de la sequía se detuvo el flujo de impuestos en los pueblos mayas, los subordinados no vieron ningún beneficio en seguir entregados a líderes ineficientes: simplemente los decapitaron y se fueron, sucediendo que al poco tiempo millones murieron de hambre a pocos kilómetros de donde habían vivido durante generaciones.
En Groenlandia, un par de siglos después, la sofisticación de los granjeros nórdicos era semejante a la de Europa Occidental: tenían libros, obispos, ropa de moda, utensillos, y por supuesto grandes galpones donde se acumulaban los impuestos a enviar a Noruega.
Ellos si eran mas parecidos a nosotros. La vegetación era exuberante, como las cosechas y todo lo que proveía el mundo agrario. Cerca vivían los esquimales que venían desde Canadá por lo que estaban completamente adaptados al clima frió: eran nómadas, usaban ropa gruesa, eran cazadores, acostumbraban a enfriar animales muertos en el hielo y todas sus técnicas estaban adaptadas al hielo.
Por esa época comenzó una pequeña era de hielo que duró 400 años y como le había pasado a los mayas bajó la productividad de las cosechas, las ovejas se murieron y tuvieron que empezar a comer focas como sus vecinos. Hacia 1450 toda la población había desaparecido hambrienta y congelada.
Ni los mayas ni los groenlandeses lograron adaptarse al cambio climático, al menos sin pagar costos enormes, destrucción de su cultura incluida, salvo los esquimales.
En lo que hoy es Estados Unidos en esos años los anasazi se enfrentaron al cambio en pueblos como Mesa Verda, en Colorado. En sus ciudades de 50 mil personas, con sus quivas o piedras rituales, talleres, casas y palacios sostenidos por impuestos tenían provisiones de alimentos para 2 años.
Al llegar la super-sequía se apartaron de sus costumbres, quemaron sus casas, se volvieron cazadores recolectores y migraron al sur, para que sus descendientes fundaran el imperio azteca.
Hoy estamos en un momento parecido. Como tantas otras veces. Solo dos sequías nos separan de una nueva primavera árabe pero como dice la canción está todavía muy oscuro todavía como para verlo. El viejo tren negro del paraíso está llegando.
Se siente como que estamos tocando las puertas del cielo, pero el cielo se calienta, el dióxido de carbono se acumula, el agua se evapora y la producción de alimentos puede entrar en una peligrosa espiral descendente.
El mar sube desde hace décadas y en el último siglo aumentó unos 30 cm. A medida que el mar sube miles de personas pierden sus lugares de vida y serán cada vez mas.
No es algo nuevo: hace 8400 años mas o menos el nivel de los océanos subió de golpe, al abrirse en Canadá un glaciar que contenía un lago del tamaño de California: el resultado fue el surgimiento del Canal de la Mancha y la formación del Estrecho del Bósforo con la consiguiente aparición del Mar Negro y el relato del arca de Noé.
Cientos de miles de personas murieron cuando el mar mediterráneo avanzó 100 kilómetros adentro de lo que era el lago que se convertiría en Mar Negro y hubo guerras, grandes migraciones y miles de años hasta que la civilización volvió a arrancar.