« De carne y piedra somos | Inicio | Podcasting sobre tecnovida »

29 de Agosto 2007

Redes, actores y guerras


Algunas verdades científicas se convierten en "cajas negras", es decir certidumbres no problemáticas e incuestionables, axiomas de los que sabemos sólo lo que los afecta y lo que producen. Por ejemplo: "la heladera enfría". "El fenotipo no afecta al genotipo". Que sea funcional y necesario, no importa que la "caja negra" tenga una historia de vínculos, de redes relacionales.

Las cajas negras hacen brotar a los psicoanalistas: no se puede ver adentro de ellas. En ambos sentidos se brotan, se vuelven locos pero se activan, se ponen a enlazar, producir, quejarse, negociar.

Los analistas, como los científicos, espantados ante lo extraño convocan a sus monstruos: libros-objetos, supervisores-sujetos, citas-objetos, colegas-sujetos, organizaciones-objetos, popes-sujetos. Una a una las marcas de esas conversaciones van dejando sus huellas en la caja negra, pero no obstante la caja negra se ve afectada y produce, una y otra vez.

Tejen y tejen, los científicos y los políticos. Mañana, tarde y noche traducen, median e inscriben, hasta apaciguar lo diferente.

Así se tejía en Auswitch a un lado y al otro de la división entre civilizados y bárbaros. Unas y otras redes se disputan acá pero se unen allá. Algunos actantes juegan en posiciones diferentes: si allá atacaron acá defienden. A veces el disparo no sale, otras no se quiere disparar.

La ciencia como caja negra

A Diego Hurtado de Mendoza lo conocí en un curso que dio sobre el pensamiento de Ilya Prigogine. Hace poco encontré las cintas de las grabaciones, ahora necesito un grabador de periodista para escucharlas.

Según le hacen decir en el diario Clarin, para Diego nos acercamos a consensos posibles entre los científicos y la sociedad "tras desactivar intereses corporativos". Que bien! pienso, a pesar de que nos aclara que la ciencia es una "práctica humana cargada de intenciones e intereses" y verdadero corporativismo. ¿No habría sido mejor decir que la ciencia funciona como una mafia?

Así como Al Capone cayó por no poder explicar que decían esas libretas llenas de números, a los científicos nacionales y porqué no internacionales le cabría la misma condena. Aíslan el mundo en frascos y luego ellos mismos se enfrascan, para que no se pueda acceder al crimen, para que no se pueda saber de que se trata.

No lo digo desde la perspectiva de una terraza, no lo digo mirando desde arriba: continuamente me la paso leyendo papers donde se tergiversan resultados, donde se invierten cadenas de DNA, se modifican índices de suicidios o se anuncian los beneficios del próximo glifosato.

Para Diego se trata de operar en términos sistémicos, siguiendo el famoso "Triángulo de Sábato": Estado, mercado y sociedad civil, pero para mí la cosa es mas difícil, se trata de reconocer que estamos saliendo de una guerra, que los nuevos ganadores definen nuevas reglas y que el pensamiento (científico y no científico), ha quedado total y completamente subsumido a lo que digan los "equipos", esos equipos que reciben instrucciones, objetivos y tiempos y que deben pasar la información, deben mediar y traducir.

En otro artículo, ahora en La Nación, el vínculo entre los sectores económicos relevantes y la producción de conocimiento científico-tecnológico es puesto en términos mas realistas.

La transferencia tecnológica es básicamente un recurso para conseguir patentamientos, registro y clausura de bienes (intangibles en lo posible).

USA genera unas 100.000 patentes al año, Argentina 50.

Bien por Diego, pero no nos quedemos cortos.

Es verdad que se requieren inversiones y facilidades regulatorias para los que tenemos alguna Startup en marcha, pero sobretodo necesitamos reclutar un ejército de actores que den la pelea en serio por la recuperación de las posibilidades de pensar, crear y emprenderlas en el lugar del mundo que hemos elegido o en el que nos ha tocado en suerte nacer y morir.

Publicado por lukasnet a las 29 de Agosto 2007 a las 05:40 PM

Comentarios

Publicar un comentario




Recordarme?